Diseñamos para la empresa de bibliotecas digitales ODILO, su nueva sede en Madrid.
La planta de oficinas, ubicada en un histórico edificio de la capital, consta de 700 m2 distribuidos en varias zonas, siendo la más amplia, la dedicada a oficinas.
Se creó un espacio multiusos a modo de auditorio, para la realización de ponencias y reuniones.
Otra de las necesidades de nuestros clientes fue la de dotar a las oficinas de un espacio dedicado (como no) a la lectura, por lo que creamos un espacio acogedor con reminiscencias de las bibliotecas convencionales, pero sin las restricciones espaciales que el almacenaje de libros físicos nos habría impuesto.